Ésta soy yo

Ésta soy yo

domingo, 18 de mayo de 2008

Me gustaría contar un trocito de mis sentimientos y recuerdos. Veo en la lejanía, una jovencita alegre, responsable y dispuesta a ser util siempre en su entorno.
Esta joven, si mal no recuerdo, tenía un físico agradable: era deldada, de pelo negro en forma de melena, una cara agraciada....y la lozanía de la juventud.
Ella tenía siempre deseo de aprender, de avanzar, de estar al día en cosas que en esa época , era casi una obligación que la mujer supiera como: las tareas de la casa, aprender a coser, a bordar y todo tipo de labores. Si sabías todo eso, eras una mujer con garantía. O sea, una mujer completa, para encontrar marido. ¡Ha! si eras prudente, comprensible, ahorrativa, hacendosa,....
mejor que mejor. Bueno, pues creo que esta joven tenía muchas de estas condiciones a su favor.

Su vida transcurría normal; dentro de lo que se entendía normal en aquellos tiempos: salir de paseo sábado y domingo, de cinco de la tarde a nueve de la noche. También la recuerdo, en la azotea de su casa con su amiga, organizando un Guateque para amigas y amigos ,ya que estaban de moda los Picús. Eso sí, con las mamás presidiendo la fiesta con patatas y refrescos.
Bueno, pues éramos felices, porque yo también estaba allí. Os confieso que antes de escribir esta historia, he pedido permiso a esta joven. Sin su consentimiento, nunca lo hubiera hecho.
Continuará. Piconeragaditana.

2 comentarios:

Panflín dijo...

Al hacerme la imagen de las "fiestas en la azotea" me he acordado de experiencias propias, algo más modernas que las que tú cuentas.
Qué curiosa sensación, la de estar "en casa" y al mismo tiempo fuera de ella, por el simple hecho de subirte a la azotea.

A la vista del cielo, por encima de lo cotidiano, y en compañía de los amigos intentando que todos lo pasen bien.

Así te veo.

Panflín dijo...

Dices continuará pero esto no continúa.
¿Es que no vas a seguir con las historias, Piconera? Ya no tienes excusas de averías informáticas...